Encontrarse con maneras y modos de vestir que sobreviven por años y que buscan formas de hacer más bella su presentación en la actualidad, el estilo del atuendo los elementos que adornan, colorean y embellecen la imagen de la chola paceña en su presentación, accesorios de la propia modernidad a los cuales se accede y que en el pasado eran restringidos sólo al uso de las damas, señoras, señoritas y de vestido.
ORIGEN DEL NOMBRE
Según el autor Antonio Paredes Candia, en su libro “La Chola Boliviana”, nos dice que la palabra chola, procede del español chulo que identifica al individuo varón, que colabora con el torero, dentro del ruedo de toros, distrayendo al animal cuando el matador hace cambio de capa.
VESTIMENTA
Se dice que la chola paceña es un patrimonio cultural e intangible de Bolivia, y que por fuente de inspiración se inició en el Museo Costumbrista de la ciudad de La Paz una exposición sobre la evolución de lo tradicional a lo moderno de este traje, que, pese al tiempo, no se alejó de lo usual de las piezas principales: mantilla, zapatos, pollera, joyas y el habitual sombrero borsalino.
La forma de vestir actualmente de la chola paceña se manifiesta en el uso de material importado para confeccionar la ropa; y las últimas ideas que se manifiestan en las joyas. Las tradicionales fiestas a lo largo del año, les dan la oportunidad ellas de mostrar coquetamente su elegancia y el costo al que llega todo su vestir, ya que se califica de muy alto precio. También se distinguen las damas de pollera que ejercen una profesión, especialmente en el tiempo reciente en que la chola no está ausente de ningún ámbito laboral.
ATUENDO DE ANTAÑO
La Chola paceña de antaño era una mujer distinta a la de ahora ya que iba vestida de pollera larga con botas al estilo europeo de fines del siglo XIX y principios del siglo XX de tal manera que no dejaban ver las piernas. Otros distintivos eran las blusas con abundante encaje, sombreros claros de copa alta y enaguas cuyos encajes frecuentemente eran más largos que la pollera y por lo tanto visibles.
El traje de la mujer de pollera de antaño llevaba colores grises, ya que utilizaba seda pesada, tanto en la manta como en los flecos, al igual que los zapatos que eran más conocidos como botines de taco alto, y el sombrero de "jipijapa", que tiene como característica a la de Ecuador.
Su atuendo estaba acostumbrado a utilizar telas de tipo seda que podía combinarse con la pollera, manta, sombrero, jubón ajustado y botas. En general, la vestimenta de la chola se caracterizó por el lujo y colorido y elegancia que le valió el nombre de “chula” en señal de admiración o algo de desdén por parte de los europeos residentes.
El sombrero era característica del traje de la chola paceña, en tiempos anteriores poseía su propio estatus como parte del atuendo total, donde la marca y calidad eran muy importantes; se cuenta que los ladrones codiciaban este atuendo por su alto costo, obligando a las mujeres de polleas a que dejaran de usarlo.
CARACTERÍSTICAS PARTICULARES:
Hasta antes de 1920 el sombrero de la chola paceña se elaboraba a base de tejido con la fibra de las hojas de la hierba del esparto. Un sombrero de la chola paceña que en sus inicios tenia, en cuanto a medidas, una altura aproximada de 15 centímetros, con unas alas, o faldas, planas de 5 a 6 centímetros, y un color que predomino en esos tiempos era el blanco.
La manta en el pasado era dos una que se ponía al pecho, que generalmente es tejida de lana de vicuña y prendida a un hombro con un alfiler la que era llamada manta de abrigo que le cubre los hombros y la que ella sostiene en los antebrazos.
La chaquetilla de la chola paceña cubre su busto con una chambra muy laboreada que de acuerdo con la región en donde se usa o a la calidad de la tela con que ha sido confeccionada, lleva diferentes nombres.
Las polleras constaban de cuatro alforzas o bastas, largas y gruesas; distintas calidades de telas de las cuales son elaboradas: unas más industriales otras más artesanales.
Las enaguas también llamadas Sayas, fustán, centro o “mankhancha” en idioma aymara: que se trata de polleras interiores a la pollera exterior hecha de tela blanca que pudo ser lienzo, lino, tela de algodón u otro, pero más delgado, suave y liviano que las polleras; esto para brindar calor en las temperaturas frías.
Las botas estaban hechas de caña alta, cuatro dedos debajo de las rodillas, ajustadas a las piernas, confeccionadas en cabritilla o gamuza, con abotonadura a un costado o con pasadores en la parte delantera y un taco estilo Luis XV. Las botas eran fabricadas por un famoso zapatero de apellido Tovar.
Las joyas en el pasado, según la información de Antonio Paredes Candia, fueron, y aún son en la actualidad su tarjeta de presentación ya que la chola paceña sostenía la manta de pecho con broches que se los denominaba bastones y topos, los primeros de uso diario y los segundos para engalanarse en un día de fiesta o asistir a un convite. Los más extravagantes solían ser los más atractivos, ya que eran de oro o plata.
La ramada era otra de las joyas, que como lo señala Antonio Paredes Candia, la ramada hace referencia a un tallo, a una rama, de la cual se desprenden hojas que se hallan entre los capullos que se hallan al costado, dos a cada lado y uno que se halla en la parte superior, además de hallar sobre la misma rama, o tallo, una flor retratada con el mismo material de la rama al igual que las hojas (oro) por debajo del capullo que se halla en la parte de arriba.
ATUENDO ACTUAL
Hoy en día la chola paceña viste muy a su comodidad, sin embargo, no deja del lado lo que realmente significa ser una chola paceña. La vestimenta actual son totalmente opuestas alas de antes, ya que lleva colores vivos, con diseños más pegados al cuerpo y mostrando un poco más de piel. Mantas de gaza transparente con calados exagerados, blusas corsés, zapatos bajos de tonos atrayentes, una joyería llamativa y el rescate de la tradicional cartera, que debe combinar con el color del traje.
CARACTERÍSTICAS PARTICULARES:
El sombrero cambia un poco su forma a comparación con la de antaño, ya que ahora es de tipo bombín, copa baja, ala corta volteada y cinta a juego con el color del sombrero.
La blusa que llevan actualmente es transparente o de tela seda, depende del gusto sin embargo es más abierta.
La pollera ahora es más larga y con amplias alforzas que difiere entre las cholas del área urbana y rural en materiales, texturas y colores, ya que en algunas prendas son elaboradas más sencillas que otras.
Los calzados actualmente es uno de los principales cambios que se puede observar, en todo el conjunto de la vestimenta de la chola paceña, ya que sí tuvo un enorme cambio. En el ámbito urbano se usan zapatos planos específicamente diseñados para cholas, que pueden ser de uso cotidiano o de fiesta. Y en otras áreas rurales utilizan sandalias que tiene la forma de este tipo de zapatos sin embargo con otro tipo de material diferente al cuero.
La manta es más larga, gruesa y abrigada, con amplia flecadura tejida en macramé, que es confeccionada en diferentes materiales. Por ejemplo, en el área rural se puede ver en combinación con la lliclla prenda de origen prehispánico. Pero la mayor parte del conjunto social de la chola paceña reemplaza la manta de abrigo por una especie de corpiño tejido (a manera tal vez de una chompa) en el cual se puede observar una infinidad de diseños tejidos por la propia chola o adquirido en una tienda o puesto de venta.
Los accesorios de aspecto llamativo para las festividades y eventos sociales se usan ostentosos accesorios de oro, plata o platino. Estos son: aretes, ramilletes en los sombreros, anillos y topos estos últimos de origen prehispánico.
Hoy en día las confecciones de la ropa para la mujer de pollera también se las presentan en eventos de moda para mostrar lo que está de “moda”, donde mucha gente asiste para disfrutar del evento o adquirir conocimiento.
Jahzel Guzman